Día del (tele) trabajo y bienestar digital. Por Marcos Vieyra, Gerente Comercial de Citrix Chile.
A poco de cumplido un año desde el confinamiento general, que llevó gran parte de las organizaciones a implementar el teletrabajo, este 1 de mayo debemos reflexionar cómo se transformó la forma en que entendemos las oficinas, la irrupción tecnológica que permitió a las empresas ser productivas y el cambio que se produjo en lo que entendemos como cultura organizacional. Pero las empresas debemos estar atentas a las nuevas demandas de nuestros colaboradores y a los efectos en su salud.
Tal vez al contrario de lo que muchos pensaron al comienzo del confinamiento, la productividad de las empresas no se derrumbó. Ya en junio de 2020, el estudio “Workquake” de Citrix recogió que 42% de las personas se sentía más productivas trabajando desde su casa. Un año después, esa percepción la confirmó Talana, afirmando que 47% de empresas chilenas dice que efectivamente se mantuvo, que incluso 25% de las empresas afirma que aumentó. Parece tan bueno que cerca del 73% del total asegura que mantendrá algún tipo de trabajo remoto una vez superada la pandemia.
Por otro lado, la tecnología fue una aliada para esa productividad. Las aplicaciones de mensajería, de organización del trabajo y teleconferencias se volvieron la agenda y la sala de reuniones. Según Workquake, 73% de sus encuestados estuvo de acuerdo que, con la tecnología adecuada, se puede ser más productivo en casa. Funcionó tan bien, que según PageGroup, 44% de los ejecutivos en Chile, dice que su empresa invertirá en más tecnología para mantener y perfeccionar el sistema. Hasta acá, todo bien.
Pero, en el detalle, lo positivo del teletrabajo parece tener una externalidad que no lo es tanto. La OMS acuñó el término “fatiga pandémica”, que agrupa el distrés sicológico, el estrés y la depresión, como las principales afecciones detectadas en las organizaciones con sistema de teletrabajo y el ruido tecnológico, y así fue como comenzamos a ver que aumentaron las licencias laborales por afecciones siquiátricas. En Citrix hicimos el estudio One Year On, que arrojó que, de los 500 chilenos entrevistados, 44% de entre 35 y 44 años ha visto afectada su salud mental.
Entonces, ahora viene la hora del balance entre qué es lo que quieren nuestros colaboradores y qué es lo que necesitan las empresas. La mayor parte de los ejecutivos quieren seguir con el teletrabajo, pero que sea más flexible y que les permita trabajar por objetivos y no por horas. Incluso 59% de ellos estaría dispuesto a bajarse el sueldo con tal de estar en una empresa que les diera esa flexibilidad. A medida que se incorporan más tecnologías al espacio de trabajo híbrido, las organizaciones deben asegurar que sean utilizadas para mejorar la productividad y al mismo tiempo fomentar la desconexión necesaria para descansar y no la hiperconexión.
Utilizando inteligencia artificial y machine learning, tienen la capacidad de aprender cómo trabaja cada empelado y se adapta para guiarlos de forma inteligente a las aplicaciones, datos y herramientas que utilizan de forma frecuente. De esta manera la tecnología se posiciona como un habilitador y no como un obstáculo, y les permite a los empleados optimizar su jornada laboral alcanzando la flexibilidad que desean.
Considerando que según el estudio One Year On el 75% de ejecutivos chilenos piensa que las empresas van a perder talentos si no ofrecen opciones de trabajo flexible, en este del Día del Trabajo, en donde el teletrabajador se ha vuelto protagonista, el llamado es a lograr una armonía, cuidar el bienestar de las personas, guiarse por la regulación vigente y usar la tecnología como aliada para esta segunda fase que está comenzando y que vino para quedarse.