Especialista entrega claves para una alimentación a base de proteínas que favorezca el crecimiento y desarrollo infantil
La nutrición tiene un papel fundamental en la salud humana, comenzando antes de la concepción y continuando durante toda la vida. En este marco, las proteínas son nutrientes críticos para el crecimiento, desarrollo, mantenimiento, la reproducción, la función inmunológica y la salud general, especialmente en niños y adolescentes.
Así lo explica la doctora Catalina Guzmán, nutrióloga de Endoplus, quien detalla la importancia del consumo adecuado de proteínas para el crecimiento y desarrollo en la niñez. “Las proteínas son el componente más abundante en el cuerpo, después del agua. Son esenciales en el desarrollo de los músculos, la formación del cerebro, el buen funcionamiento del sistema inmunológico y digestivo. Son fundamentales en la formación y reparación de tejidos. Un bajo consumo de proteínas se puede asociar con un retraso en el crecimiento y con una talla inferior para la edad”, plantea.
En ese contexto, los aminoácidos son la estructura fundamental que forman las proteínas. Hay aminoácidos esenciales que son aquellos que el cuerpo no los puede producir por lo que deben provenir de los alimentos que consumimos. “Las proteínas de alto valor biológico son las que tienen los aminoácidos esenciales, que son las que nosotros no podemos formar y estas son la leche, el huevo, pescados, las carnes rojas y carnes blancas, que son fundamentales en la dieta y por eso se deben consumir diariamente”.
Junto con ello manifiesta que, para un adecuado crecimiento, es relevante elegir alimentos que sean naturales y evitar aquellos ultra procesados. “Es importante optar por alimentos que contengan bajo contenido de azúcar, bajo contenido de grasa y poca sal, y elegir frutas y verduras además de las proteínas y distribuirlo en 4 a 5 tiempos de comida, según la edad de los niños”, expresa.
La importancia de evaluar deficiencias nutricionales
La doctora Guzmán plantea que, en casos de retraso en el crecimiento, es necesario también evaluar en la consulta médica el estado nutricional del niño o niña, para determinar cómo está su peso en relación con su estatura, y definir si hay déficit de nutrientes.
“El retraso del crecimiento y talla baja se puede deber a deficiencias nutricionales tanto de macronutrientes como de micronutrientes, o una combinación de muchas deficiencias nutricionales. En algunos casos pueden estar deficitarios en proteínas, pero también de zinc, que es un micronutriente esencial en el crecimiento lineal normal. Participa en mecanismos que involucran liberación de hormona de crecimiento, además de múltiples procesos como la cicatrización, regeneración, formación de huesos y en la síntesis de enzimas, por lo que es muy importante conocer los requerimientos de zinc para cada etapa de la vida”, explica.
Actualmente, existen herramientas de apoyo como la iniciativa en Instagram @CrezcoBien, que apoya a los padres con orientación científica sobre temas de nutrición, además de la importancia de dormir bien, practicar actividad física y recomendaciones desde la psicología porque tener hábitos saludables son claves para el desarrollo infantil, señala.
En esa línea, la experta manifiesta: “alimentarse en forma saludable es fundamental siempre, especialmente en la niñez y la adolescencia. El estado nutricional tiene relación con el crecimiento y tanto las situaciones de malnutrición por déficit como por exceso en casos de obesidad, se asocian a alternaciones en el crecimiento. Es necesario que los niños estén en un estado nutricional adecuado, es decir, eutróficos, para lograr un óptimo crecimiento”.
