Grave crisis presupuestaria afecta a las caletas pesqueras artesanales del país.
Como grave calificaron dirigentes de la pesca artesanal de la Conapach, la situación en la que se encuentran los puertos pesqueros artesanales del país, especialmente urbanos, por efectos de la pandemia y el decaimiento en la actividad pesquera, comercial y turística, lo que ha provocado un déficit presupuestario que está causando problemas en su mantención y en el empleo de un centenar de personas que trabajan en su administración.
Cuentas de insumos básicos, pago de concesiones, retiro de residuos, sueldos de personal administrativo, de seguridad, aseo y hasta arriendos a la empresa privada, sería algunos de los ítems que las organizaciones de pescadores artesanales a cargo de un puertos pesqueros, estarían no pudiendo financiar por falta de entradas, relativas al cobro de desembarques, varados, estacionamientos y el arriendo a restoranes, en algunos casos.
“En lo particular, el muelle de la caleta de San Vicente se encuentra sin capturas de ningún tipo desde mediados de julio. La nula descarga de albacora y bacalao este año, lo tardío del inicio temporada pelágica, la implementación de la veda de la sardina, sumado al cordón sanitario hizo que nuestra caleta tuviera mínima actividad y actualmente esté totalmente paralizada en las descargas, fuente principal de ingresos de nuestra administración”, señaló Cesar Jorquera, presidente de la Asociación Gremial de Pescadores Artesanales de San Vicente, Talcahuano, región del Biobío y director de la Conapach.
“Hace más de un año que no hay descarga de jibia, la temporada de sardina fue de solo 3 meses y las capturas y descargas de merluza también fueron escasas y a precios muy bajos. Además tenemos que pagar arriendo mensual a la Empresa Portuaria por el uso de la mitad de nuestro muelle, ya que tras la ley de puertos, el espacio donde está instalada la mayor parte de la infraestructura de nuestra caleta quedó en poder de la Empresa Portuaria de Talcahuano, siendo que es un lugar que históricamente hemos ocupado los pescadores artesanales ”, subrayó Jorquera.
Y agregó, “además, hemos tenido que hacernos cargo por completo de las medidas para enfrentar la pandemia, con gastos de sanitización, compra de mascarillas, termómetros digitales, alcohol gel, amonio cuaternario y guantes para la gente que va al muelle y no puede costearse esos insumos, por lo que es oportuno decir que ha habido cero apoyo del gobierno a través del Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal, INDESPA, del Gobierno Regional y de la Armada”.
Por su parte, Sergio Guerrero, secretario del Sindicato de pescadores artesanales de Arica, región de Arica y Parinacota y director de la Conapach, indicó que en su comuna ya perdieron la cuenta de cuántos meses llevan en cuarentena obligatoria, ahora indefinida, disminuyendo la actividad en casi un 50%, provocado por la falta de canales de comercialización y de demanda.
“Como nosotros figuramosa como arrendatarios de la Empresa Portuaria de Arica, EPA, nos bajaron el arriendo en un 80% pero eso no es todo, porque los gastos más grandes que tenemos nosotros es el gasto en personal y servicios básicos de agua y luz, más un gasto extra que hemos tenido que sostener para mantener a raya el virus, con la compra de insumos para la sanitización y la contratación de empresas especializadas en fumigación, lo que ha subido los gastos de administración”, sostuvo el dirigente ariqueño.
“Además, la situación se está haciendo insostenible para el pescador artesanal de consumo humano, por lo que solicitamos que el gobierno nos apoye porque va a llegar el momento en que no podremos cubrir los gastos porque no hay desembarco, no hay varadas y el cobro de estacionamientos está bajo, así como la venta de hielo está paralizado porque no están funcionando restoranes y las embarcaciones no están saliendo”, recalcó.
Juan Cáceres, director de la Conapach y de la Federación de Pescadores artesanales de Iquique, Región de Tarapacá, coincidió con sus compañeros en que las dificultades se están haciendo cada vez más evidentes en la administración de la caleta a cargo de la Corporación de Pescadores Artesanales de Iquique, producto principalmente de la disminución de las entradas, producidas en gran medida por el no pago de los arriendos de parte de los restoranes que actualmente se encuentran sin poder funcionar.
“Si uno se da cuenta, el gobierno ha brindado nulo apoyo al sector pesquero artesanal, no hay inyección de recursos y muchos de los pescadores que se encuentran sin poder trabajar no están recibiendo apoyos económicos estatales por no estar dentro del 40% más vulnerable, por lo que la crisis se está haciendo cada vez más patente y dura para la actividad”, recalcó Cáceres.
Así mismo, Juan García, presidente del Sindicato de Pescadores de Caleta Anahuac, de la Cooperativa de Pescadores de Puerto Montt, en la región de Los Lagos, dijo que el financiamiento de la caletas es una situación de estrés constante, debido a que el ámbito productivo bajo en un 80% y no hay desembarques, “no hay ventas ni de recursos pesqueros, ni de hielo, no hay servicio de traspaso de carga, nada de eso existe en este momento”, indicó.
“Hoy estamos subsistiendo gracias al cobro por amarre
de embarcaciones y servicio de delivery en el puerto, para pagar las
remuneraciones, pero ya tuvimos que hacer renegociación de las cuentas de luz
por un monto cercano a los 10 millones de pesos y nadie nos ha tendido la mano,
nos han preguntado de parte del gobierno, pero nada y no tenemos ninguna
posibilidad con los bancos, por ser un Sindicato”, enfatizó el dirigente.
García continúo diciendo que “claro que necesitamos apoyo, porque si miramos la administración de los Puertos Pesqueros como los de Calbuco, Dalcahue y Carelmapu por nombrar algunos, deberíamos ser considerados como una pyme porque tenemos un negocio establecido, pagamos impuestos, tenemos gente trabajando, pagamos imposiciones y hoy día nos vemos desprotegidos. El gobierno debería reconocer la pesca artesanal en la región de Los Lagos como un polo económico importante, productivo, que necesita de un salvavidas tal como se lo han brindado a otros sectores”.
“Yo creo que el gobierno debería preocuparse más de una actividad que alimenta a la población de todo el país. Si el gobierno considera a los puertos pesqueros como un polo de desarrollo para la pesca artesanal, debiese tener una mirada de apoyo y no de “arréglenselas como puedan” y de solo de fiscalización. Ni siquiera están listos los trámites para pasar a la nueva ley de Caletas, que suponía una ayuda para su desarrollo, por lo que nos sentimos defraudados”, cerró el dirigente de la región de Los Lagos.