Lo bueno, lo malo y los desafíos: experto analiza el nuevo gabinete de Gabriel Boric
Uno de las jornadas más esperadas fue la que se vivió hace unos días en el Museo de Historia Natural de Santiago. El Presidente Electo, Gabriel Boric, eligió ese lugar para dar a conocer el equipo que lo acompañará en los próximos cuatro años de gobierno. La cita generó mucha expectación, pero además mostró el primer atisbo de lo pretende entregar la nueva administración, desmarcándose de lo que hasta la fecha se conocía.
“El nuevo gabinete tiene bastantes aspectos positivos”, comenta el psicólogo político Patricio Saavedra, académico de la Universidad Estatal de O’Higgins (UOH). Según él, uno de esos aspectos es, sin duda, la mayor presencia de mujeres. “No solo es importante en su número, también la posición que ocupan. Ver a Izkia Siches en Interior ya es una señal potente, pues más allá del peso histórico de ser la primera mujer nominada a ese cargo, también le da un peso al discurso de la equidad. Eso sumado a posicionar el Ministerio de la Mujer en el comité político de La Moneda, son aspectos positivos y que van en la línea de lo que el Presidente Electo ya había anunciado”, señala el experto.
Saavedra también destaca la nominación de Mario Marcel en el Ministerio de Hacienda, pues le parece que su nombramiento “da señales de estabilidad tanto en Chile como el extranjero. El nuevo ministro da continuidad a la política en términos macroeconómicos, lo cual es positivo en el contexto de pandemia y de una anunciada recesión económica mundial”, analiza el académico.
También destaca que hay un reordenamiento de la próxima coalición política gobernante, “ya no se trata solo de Apruebo Dignidad, se suman varios partidos ex Concertación, salvo la Democracia Cristiana. Esto habla de un giro del Presidente Electo hacia aspectos más de centro, porque debe posicionarse como el Presidente de todos los chilenos y eso lo lleva a generar coaliciones y acuerdos con sectores más amplios”, explica el doctor en Psicología.
Para Patricio Saavedra, Boric y sus asesores han sabido dar este giro. “Entendieron que el pacto Apruebo Dignidad no puede gobernar por sí solo, ni lograr la legitimidad que necesita para llevar a cabo un gobierno cuyas obras se espera que tengan un alto impacto y repercusión en el tiempo”, señala.
Por último, según el académico, la presentación de los nuevos ministros también evidenció un estilo propio, destacado en otras oportunidades, “pero es necesario que este estilo puedan matizarlo con una impronta más institucional e intentar ajustarse a los protocolos”.
Desafíos del Gabinete
Para el experto, el primer desafío es mantener bajo control elementos que pueden ser díscolos o realizar conductas caudillistas, separatistas o que de alguna manera desafíen al nuevo gobierno. “Esos elementos están dentro de la propia coalición y podrían también estarlo al interior del propio gabinete”, explica.
“La idea es que el público capte que este es un equipo, liderado por el Presidente Electo y que, si bien lo escucha, también tiene preponderancia sobre él”, puntualiza el psicólogo.
Otro desafío es que, con la presencia de mucho independiente en el Gabinete, se genera la necesidad de mantener la cohesión al interior del gobierno: “Si tenemos personas que son simpatizantes del bloque, pero no hay una manera formal de controlarlos, se tratará de un trabajo mayúsculo para que el Gabinete se vea cohesionado y que el caudillismo no sea una constante”.
Agrega además que muchos de estos nuevos ministros fueron parte de un movimiento social determinado o de varios, “por lo tanto el desafío de ellos y del Presidente Electo es pasar de la protesta en la calle a una vía más institucional. Muchas veces estas transiciones no son logradas, porque representan distintas lógicas. Una cosa es ser dirigente social y otra muy distinta es asumir como ministro/a de Estado y eso debe entenderlo la opinión pública”, puntualiza el académico de la Universidad Estatal de O’Higgins.
Los problemas
“Cuando se dan muchas señales de cambios puede ser contraproducente, si tu das la idea de que piensas cambiar demasiadas cosas y en realidad puedes hacer dos o tres, eso tiene un alto potencial de decepcionar a la población, tanto a quienes votaron por el Presidente Electo como a quienes están detrás del gobierno. Esto a su vez abre la duda sobre lo que este gobierno pueda hacer en materia de gestión”, señala el analista.
Por último, agrega que, si bien es muy positiva una fuerte presencia de académicos en el nuevo Gabinete, “se ve la incidencia de ellos en el tipo de relato que se da y que se pudo observar en la presentación del Gabinete. Con grandes ideales y relatos, lo cual es muy académico. Pero el problema es que el Presidente y sus asesores deben saber cuándo limitar eso. Debemos tener claro que las habilidades directivas, políticas y diplomáticas de los académicos y académicas chilenos están en un estado más bien embrionario, lo que quiere decir que no se logran plasmar en política pública real, operar en un mundo real”, finaliza.