Emprendedor osornino potencia su negocio de servicio de mantenimiento de maquinaria agrícola en terreno
En 2008, luego de más de una década ligada a las maquinarias agrícolas, pasando por bodegas de materiales, empresas procesadoras de minerales y predios agrícolas, Maximiliano Hitschfeld, decidió comenzar a formar su propio sueño emprendedor. “Desde muy pequeño siempre estuve ligado a los fierros, pero mi camino no comenzó así, ya que yo partí estudiando algo que no era lo mío. En ese tiempo no existían carreras técnicas y los fondos no estaban para estudiar algo similar. Entonces por 2 años estudié pedagogía, lo que claramente no era para mí, por lo que lo descarté y me inserté en el mundo laboral. Así fue como comencé a formar mi camino y a pensar en crear mi marca propia”, recuerda el emprendedor, quien nació y se crió en Puerto Octay, pero que a los 13 años se mudó a Osorno a vivir.
De esta manera, nació Hitschfeld Servicios, negocio enfocado al mantenimiento preventivo, predictivo y correctivo de maquinaria agrícola en terreno, el cual cuenta hoy con alrededor de 30 clientes, forjados en base al boca a boca y con un compromiso de fidelidad al 100%, y el cual mantiene usuarios desde Paillaco hasta la isla de Chiloé.
Pero no todo fue fácil en este camino de emprender. Baches financieros y un futuro incierto rodearon la vida de Maximiliano Hitschfeld el 2008. “Ese año me encontraba en una disyuntiva, debido a que estaba a cargo de un predio y me dicen que no podía continuar por un tema económico. Le di vuelta al asunto y vi una oportunidad en el mundo de la maquinaria, dado a que era algo con lo que había trabajado desde años, había aprendido bastante y era un nicho que comencé a explorar de forma personal. Y es que todo lo hecho y lo aprendido, lo hice de manera autodidacta. Pero no me quedé así, ya que el 2014 AIEP abrió la carrera Técnico en Mecánica Automotriz en Maquinaria Pesada, donde decidí inscribirme y el 2016 obtuve mi título. Allí reforcé mi conocimiento, obtuve nuevas metodologías y parámetros para desarrollar mi negocio”, comentó con orgullo.
Así fue como comenzó este trabajo unipersonal en terreno, el cual ha logrado salir adelante, gracias a que desde el primer día se ha mantenido en un constante desarrollo y capacitación. Además de tener un compromiso en cuanto a cumplimiento de objetivos y desarrollando una labor que puede dar tranquilidad a cualquier cliente. “Yo voy directamente donde se me necesite. No tengo un taller establecido en un lugar, sino que ocupo las dependencias de quien requiera de mi servicio. Allí se realizan diagnósticos, se desarman y se llevan a maestranzas en los casos cuando hay que llevarlos, donde superviso y retiro los trabajos”, apuntó.
El emprendedor sostuvo que esto es mucho más eficiente para los agricultores, por cuanto se realiza todo en su predio, ahorrando el costo y el tiempo de trasladar maquinarias. “En muchos casos compro materiales por cuenta de mis clientes, en algunos casos pago yo y después me reembolsan el dinero o cuando tienen cuenta, compro con sus cuentas. Todo esto es gracias a la confianza que se ha adquirido con cada uno de ellos a través de los años, dado el trabajo que he venido desarrollando”.
“Si hacemos una comparación en relación a quienes realizan el mismo trabajo, creo que Hitschfeld Servicios se diferencia, ya que el trato es directo con el cliente. Yo me comunico con el dueño del predio o en su defecto con el administrador. No más allá. No existe ningún otro interlocutor, ni nadie más que vaya a hacer algo por mí”, resaltó.
Si bien el desarrollo de este servicio se había sostenido en el tiempo, el emprendedor recalcó que necesitaba seguir capacitándose para ordenar de mejor forma las labores diarias que realizaba, además de seguir creciendo en tecnología y ofreciendo un servicio integral. “Fue así como en noviembre del 2021 conocí el trabajo que realiza la Fundación Antonio Hitschfeld, a través del programa Escala Los Lagos. Postulé y fui uno de los ganadores. Ellos me han entregado mentorías específicas que me han ayudado a ordenar muchas cosas, entre ellas, el cómo vender mi negocio y mantener un flujo de caja, donde hoy tengo claro cuáles serán los costos en cada acción. Además, cuento con un mentor que a través de cada reunión, me ha facilitado la manera de trabajar y marcado una pauta de cómo actuar en cada caso”.
“En este programa conocí una gran comunidad de emprendedores, con una tremenda calidad humana, quienes juntos soñamos con mejorar nuestro trabajo. La Fundación Antonio Hitschfeld con su programa Escala Los Lagos me han ayudado mucho a conocer nuevos métodos de trabajo. Y es que desde que fui uno de los seleccionados, he venido con un constante crecimiento, aprendiendo cada día nuevas cosas y actualizándome para entregar el mejor servicio”, mencionó el emprendedor.
A su vez, como cualquier negocio le gustaría seguir creciendo, pero en la medida que esto ocurra, también debe coordinar los tiempos para atender a cada uno de sus clientes. “Si bien muchas veces me han propuesto tener a alguien más que me acompañe en mi negocio, siento que no va a ser lo mismo, porque el cliente no se va a sentir con el mismo interés, puesto que están acostumbrado a una atención y a una confianza que se ganó a través del tiempo. Yo partí desde 0 y llegué hasta donde estoy, ya que me he forjado un nombre en el sector agrícola, a través de mi trabajo y creo que mi mayor activo hoy, es la fidelización con cada uno de mis clientes”.
En cuanto al futuro, el emprendedor se siente muy optimista, gracias al trabajo que ha venido desarrollando. “Sabemos que la agricultura es primordial y nunca va a parar, por eso he ido comprando con el tiempo máquinas y las he ido reparando. La idea que tengo es abrir otra ala de negocios, centrada en la mecanización agrícola, incorporando a mi hijo mayor y que él se haga cargo de ese sector. Siempre supervisado por mí y usando el mismo sistema que me ha dado éxito hasta el día de hoy: personalizado y directo con el cliente”.