Accidente fatal en la Ruta 5 Norte: seis muertos y 11 heridos reavivan la urgencia por una reforma vial en Chile
En la madrugada de este martes 11 de marzo, un accidente ocurrido en la Ruta 5 Norte dejó seis muertos y 11 personas lesionadas, de las cuales dos se encuentran en riesgo vital. Según la fiscalía, la causa del siniestro sería el volcamiento de un bus, que posteriormente fue impactado por otros vehículos, involucrando finalmente a un total de cuatro buses.
Este suceso está lejos de ser un caso aislado. Según datos del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), en conjunto con Carabineros de Chile y la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (CONASET), durante el año pasado se registraron cerca de 1500 muertes por accidentes de tránsito en Chile.
Entre los factores que han provocado estos incidentes se incluyen la imprudencia al volante, la conducción por parte de personas con problemas de salud, el exceso de velocidad, el consumo de alcohol e, incluso, la baja calidad de la infraestructura vial.
En este contexto, el proyecto de Ley Jacinta, actualmente en discusión en el Senado, cobra una importancia crucial para su pronta aprobación. De hecho, a raíz de lo ocurrido en la Ruta 5 Norte, se está evaluando la posibilidad de incluir como indicación la obligatoriedad de que los buses de transporte regional cuenten con conos de emergencia con luz LED.
Mientras el proyecto de ley avanza en su trámite, los accidentes viales continúan ocurriendo. Por ello, la familia de Jacinta y quienes impulsan la iniciativa insisten en la necesidad de que esta medida sea aprobada con celeridad. “Este proyecto es urgente. No solo buscamos justicia para Jacinta, sino también proteger a todos aquellos que podrían verse expuestos a situaciones similares”, expresa Max Schnitzer, abuelo de Jacinta e impulsor de la iniciativa.
Caso Jacinta González: La tragedia que dio inicio a la lucha por la seguridad vial
La pequeña Jacinta, de cinco meses, falleció el 28 de agosto de 2022 en un trágico accidente. El conductor responsable, un hombre de 80 años con cáncer en etapa IV, que confundió el freno con el acelerador, según el informe de Carabineros, lo que provocó el fatal desenlace. Si bien este caso en particular inspiró el proyecto de ley, múltiples incidentes similares han ocurrido en el país.
“Es fundamental garantizar que quienes están al volante tengan las condiciones necesarias para hacerlo de manera segura. No podemos permitir que errores evitables sigan cobrando vidas inocentes”, manifiesta Schnitzer.
Gabriel Celedón: Un trágico accidente que sacudió a Valdivia
El 19 de junio del año pasado, Gabriel Celedón, de 7 años, y su abuela, Magaly Álvarez, de 67, cruzaban por el paso peatonal frente a la unidad de Carabineros de Isla Teja, en Valdivia, cuando fueron atropellados por una camioneta conducida por Viviana Gutiérrez. Como consecuencia del impacto, el niño perdió la vida, mientras que su abuela sufrió múltiples fracturas que la mantuvieron hospitalizada en el Hospital Base de Valdivia durante dos meses.
Alejandro Celedón, padre de Gabriel, destaca la importancia de legislar al respecto. “Necesitamos un marco legal que refleje la verdadera gravedad de estas conductas, similar a lo que existe en países desarrollados. No se trata solo de castigo, sino de prevención. Si las personas saben que enfrentarán consecuencias serias, lo pensarán dos veces antes de conducir sin estar habilitados”.
Una estudiante víctima de la imprudencia al volante: el caso de Trinidad Bunster
La entonces estudiante de Derecho de la Universidad del Desarrollo, falleció el 31 de marzo del año pasado, a causa de un accidente provocado por un conductor en estado de ebriedad en Santo Domingo, Región de Valparaíso. Trinidad se encontraba acompañada por una compañera universitaria cuando ambas aceptaron la invitación para salir en auto durante la madrugada por parte de dos jóvenes, quienes se encontraban alcoholizados. El conductor, José Ignacio Venturino, registró una tasa de 1,24 gramos de alcohol por litro de sangre y fue él quien, al impactar contra una señalización y un árbol, causó la muerte inmediata de Trinidad.
Cristian Bunster, padre de Trinidad, denuncia la falta de justicia y la necesidad de penas más severas. “Todos los días hay alguien que se sube borracho a un auto, todos los días alguien muere por culpa de la imprudencia. Y las leyes siguen siendo blandas, siguen permitiendo que estos tipos sigan manejando. No basta con educar, también hay que castigar. Las penas tienen que ser ejemplares, porque hoy día un tipo mata a alguien manejando borracho y a los meses ya está libre, mientras las familias quedan destruidas de por vida”.
¿Qué propone el proyecto de Ley Jacinta para mejorar la seguridad vial en Chile?
Con el objetivo de generar mejoras legales para otorgar mayor seguridad vial, el proyecto de ley establece diversas regulaciones. En primer lugar, exige que los conductores presenten una declaración jurada de salud, en la que aseguren no padecer enfermedades restrictivas o inhabilitantes, conforme a lo regulado por los Ministerios de Salud y Transporte.
Asimismo, las municipalidades deben ser responsables de certificar las capacidades físicas y psicológicas de los solicitantes a través de evaluaciones pertinentes. Además, la omisión de enfermedades relevantes podrá considerarse una infracción grave, lo que podría derivar en la cancelación de la licencia.
Junto con esto, el proyecto de Ley Jacinta propone diversas medidas para proteger a las víctimas de accidentes de tránsito y a sus familias. Entre ellas, se contempla el aumento de las indemnizaciones del Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (SOAP), elevándolas a 600 UF para casos de fallecimiento o incapacidad permanente total o parcial, además de ampliar las coberturas para gastos médicos y hospitalarios. Asimismo, se reduce el plazo para el pago de indemnizaciones por fallecimiento, pasando de 10 a 8 días hábiles.
El proyecto también establece un fuero laboral de seis meses para los padres que han perdido a un hijo en un accidente de tránsito, garantizando su estabilidad en el empleo. Además, incluye apoyo psicológico y legal para las familias afectadas, asegurando acompañamiento en su proceso de duelo y búsqueda de justicia.
Entre otras disposiciones, se introducen restricciones para el transporte de acompañantes en motocicletas. En este sentido, se prohíbe que los menores de 12 años viajen en estos vehículos. Asimismo, se establece que los acompañantes deben mantener los pies apoyados en los reposapiés laterales y no podrán ubicarse entre el conductor y el manubrio.