Computación cuántica: sus riesgos y beneficios

Por: Carolina Pizarro, Directora Asociada de Ciberseguridad de Accenture Chile

El término “computación cuántica” sigue siendo complejo, poco común y difícil de comprender, pero en simple, se trata de tecnología que puede abordar problemas con numerosos factores y posibles resultados mucho más rápido que una computadora normal y es que de esta manera, se podrán procesar tanta cantidad de datos de manera tan rápida que será de gran utilidad, especialmente cuando se maneja información clínica, social, económica y ambiental. Esto, supondrá un potencial de acelerar rápidamente el desarrollo de la inteligencia artificial, así como la elaboración de productos más eficientes, desde nuevos materiales para baterías en automóviles eléctricos, hasta medicamentos mejores y más baratos, o paneles solares enormemente mejorados, por ejemplo. Los científicos esperan que las simulaciones cuánticas puedan incluso ayudar a encontrar una cura para el Alzheimer.

El desarrollo de esta tecnología mucho más eficiente, sin dudas, viene a resolver problemas de la computación tradicional, pero también representa un desafío de seguridad que requiere atención hoy para proteger nuestra información mañana. Esta tecnología, usada de mala forma, se convierte en un gran problema para la industria, ya que es capaz de dejar obsoleta la criptografía tradicional, es decir, los algoritmos que se utilizan para codificar la información y dejarla ilegible y segura para mantener la privacidad y la seguridad de los datos durante su transmisión o almacenamiento.

La computación cuántica llegó para cambiar el mundo de la ciberseguridad y sabemos que la transformación será tan profunda que todas las medidas de seguridad informática que conocemos hoy en día quedarán obsoletas e implicará un cambio en la forma en que encriptamos nuestros datos.

Por todo esto, debemos responder de manera proactiva a la amenaza cuántica e implementar los elementos que permitirán una transición ordenada y oportuna a la criptografía diseñada para resistir los ataques cuánticos. De lo contrario, nuestra seguridad y prosperidad económica se verán comprometidas a medida que el gobierno y otros sistemas de infraestructura críticos se vuelvan vulnerables a acciones hostiles debido a una criptografía débil.

El desafío es que aún no se dispone de un conjunto de reemplazo de algoritmos criptográficos maduros y probados con seguridad cuántica. No solo la implementación de capas de seguridad cuánticas, sino también la formación de profesionales que estén a la altura, con la capacitación para usar está tecnología y evitar los riesgos de seguridad que puedan devenir.

Según información de la industria, los ataques de malware contra computadores y móviles han experimentado un aumento del 617% y del 50% en cuanto a intentos de ataques de phishing y troyanos bancarios, durante junio de 2022 a julio de 2023 y de junio de 2021 a julio de 2022 respectivamente. Al usarse de mala manera, deja obsoleta la criptografía tradicional y podría incrementar la cantidad de ataques y su nivel de impacto. ¿Debemos preocuparnos?

Sí, pero no alarmarnos ni entrar en pánico. Los avances tecnológicos pueden usarse para realizar ciberataques o ir perfeccionando y creando nuevas barreras. Los desafíos para lograr una exitosa implementación de esta tecnología son diversos y van más allá de la mera inversión en nuevas tecnologías o del desarrollo e implementación de protocolos criptográficos innovadores. Un elemento crucial para superar estos desafíos es contar con un capital humano debidamente capacitado. Se vuelve imperativo formar a profesionales especializados en el manejo de esta herramienta. A medida que la implementación avance, será esencial desarrollar una regulación acorde con su evolución. La conjunción eficaz de estos factores será determinante para el éxito y la sostenibilidad de la adopción de esta tecnología en el contexto actual

Es un hecho que las organizaciones deben tomar conciencia sobre cómo están cifrando su información y repensar los esquemas de seguridad entendiendo que la criptografía sólo es una parte de un universo mucho más grande.

Es preferible prevenir que curar, por lo que estar a la altura de los avances tecnológicos y tomar cartas en el asunto antes de que sean el estándar, será fundamental para proteger nuestra información.

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