De turistas a visitantes. Por Gerardo Domínguez, integrante del G100.
No es un secreto que el turismo ha sido una de las áreas más afectadas como consecuencia de la pandemia. A raíz de esto, el Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC) se aventuró con la proyección de tres posibles escenarios para el rubro: en el peor caso se perderán 200 millones de empleos de un total de 320 millones (10% de la mano de obra mundial) y USD 5.500 billones en gasto, y en el mejor escenario se perderán 100 millones de empleos y USD 2.600 billones en gasto.
Estos datos son catastróficos para cualquier país en que el turismo sea una pieza clave para la economía. En un país donde contamos con el desierto de Atacama, los más de cuatro mil kilómetros de costa con envidiables olas, los más de 100 parques y reservas nacionales y la mayor concentración de glaciares de Sudamérica, biodiversidad que llama la atención de las miradas internacionales cada año, sí es catastrófico.
A raíz de esta situación han tomado mayor fuerza los conceptos de turismo local y comunitario, en donde lo que se busca es que las personas del mismo país afectado por una crisis (en este caso la pandemia) sean quienes se convierten en turistas de su propio territorio.
Tengamos en mente que el dinero utilizado en viajes puede quedar en los habitantes del lugar, lo que genera un impacto positivo en la comunidad visitada. Al mismo tiempo, da una oportunidad única al turista de participar en la prosperidad de las comunidades, lo que entrega una experiencia mucho más integral que solo disfrutar de paisajes y servicios.
Algunas medidas concretas para potenciar la economía local pueden ser priorizar los restaurantes locales antes que las cadenas multinacionales, comprarle recuerdos a los habitantes del lugar, y por último, ser parte de las actividades culturales que se promueven en la ciudad.
Recorrer con estas nuevas concepciones, convierten a un turista en algo más profundo: un visitante. Convertirnos en los visitantes de nuestro propio país, no solo logrará mejorar la situación económica de la comunidad concurrida, también se verá reflejado en la reactivación laboral a nivel nacional.