La startup que ha evitado la emisión de más de cien mil toneladas de Co2 en dos años
Durante el confinamiento forzoso que el mundo experimentó por la expansión del coronavirus, diversas áreas se comenzaron a digitalizar y a implementar tecnología para cumplir sus objetivos, tales como educación, salud, industrias, incluso la atención al cliente.
En esta línea, surge Videsk, el primer video contact center del mundo que ha ayudado considerablemente a personas con movilidad reducida o a quienes hayan adaptado un estilo de vida con menos movilidad, debido a que pueden acceder a los servicios de atención al cliente sin necesidad de enfrentarse a desplazamientos de lugar.
El hecho de no tener que movilizarse para estas actividades, ha contribuido en gran medida en la disminución de la huella de carbono. Según estudios, un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero son generadas por el transporte urbano.
Estas herramientas, que permiten a los clientes contactarse cara a cara con agentes de las tiendas mediante videollamadas, ayudan a reducir la huella de carbono, evitando tener que trasladarse para resolver asuntos de atención al cliente.
Según un informe de efecto invernadero de 2019, un automóvil promedio en Chile emite alrededor de 180 g de CO2 por kilómetro, equivalente a aproximadamente 453.6 kg al año. Si cada una de 250.000 videollamadas reemplaza un viaje en automóvil, se evitarían un total de 113.400.000 kg de CO2. En esta línea, Videsk ha logrado evitar la emisión de 113.400 toneladas de Co2 en los últimos dos años, según lo indicado por Andrés Leiva, CEO de la startup.
No obstante, para el ejecutivo, a pesar de lo beneficioso que puede ser digitalizar aspectos como la atención al cliente, es importante que se complemente con un servicio entegado por personas. “Si bien el digitalizar la atención permite evitar movilizarse para personas que no lo deseen o que les complique y a su vez reducir la emisión de gases perjudiciales relacionados con el transporte, es importante que se complemente con una atención humana efectiva y empática, con el fin de optimizar su eficiencia, mejorar la satisfacción del cliente y fortalecer las relaciones a largo plazo”, manifiesta.
Integrar tecnologías de atención al cliente a distancia, pero con el componente humano presente, puede beneficiar en construir una reputación sólida del comercio y un diferenciador competitivo en el mercado actual, dice Leiva.